Narra Elizabeth
Bill, no ha ido a clases y me ha dejado con toda la tarea a mi… en realidad eso no es lo que me molesta, creo que, fue mi culpa no debí pedirle que se quedara y así no hacerme ilusiones tan rápidamente… Hay algo que no es normal en Bill, su sombra es más grande de lo normal y… creo que estoy alucinando Jimmy esta fumando Mariguana al otro lado de la habitación con una de sus amiguitas de la universidad… Lo que hace que mi dolor de cabeza aumente.
Estos días han sido terribles, Tom pasa muy seguido con ese amigo… como es que se llamaba… Adam si… Adam el que me presento en la cafetería, tenía los ojos verdes, y profundos, su mirada me daba escalofríos. He ido a la universidad con la esperanza de hablar con Bill, pero el sonido de su moto que se transforma en un susurro de lejos no se ha sentido hace 5 días…
Me eh sentido débil… muy débil hasta mis ojeras se hacen presente, cada vez que me veo en el espejo estoy mas pálida, mis ojos están perdiendo el brillo, los dolores en mi estomago se hacen presente hasta cuando estoy trabajando, necesito un doctor, estudiando medicina y no puedo auto medicarme ¿chistoso no?
Estoy pensando en ir al psicólogo, hace unos días estoy teniendo alucinaciones, en todas partes, despierto en las noches sobresaltada con escalofríos recorriendo mi espalda, sudando frio y con un miedo increíble, veo sombras sobre mí, hasta las eh podido sentir, son frías como el metal huelen a humedad y luego se van, cuando duermo puedo escuchar voces, susurros más que nada, en diferentes idiomas, alemán, ruso, latín y si es que lo que escucho realmente es latín, están en todas partes, estoy comenzando a dudar si mi pesadilla es la que me está atormentando. Mi nombre ¿Dirán mi nombre?, y esa daga o lanza, que siempre está en mis sueños… Decidí hacer un dibujo, para no olvidarme de cómo es, pues asi después podre buscar información de esta, si es que existe. Aquí haciendo un dibujo, como los pequeños – se me escapa una sonrisa- y… listo… terminado
Estoy impresionada de lo que mi subconsciente puede hacer, ¿me estaré volviendo loca?, me acerque a pegarlo en la pared, junto con un pedazo de cinta adhesiva… Me detuve a observarla un momento… Pero una punzada a la cabeza me tiro hacia la cama…
Era la tercera pastilla para el dolor de cabeza, siento que estallara en cualquier momento, algo empeora mi dolor de cabeza, el sonido de la puerta alguien está afuera… espero que se Bill…
Me levanto de la cama, para abrir la puerta sin antes ver a los mismos demonios que pasan merodeando la cocina, estos días eh aprendido a acostumbrarme a él…
Les sonrió ante ver que ellos huelen lo que cocina Jimmy, si supieran que su comida, no es del todo perfecta…
-Provecho…-Le dije. Al abrir la puerta el demonio desaparece convirtiéndose en cenizas, luego coloco mi mirada sobre el…
Narra Tom
Hoy es domingo ya ah pasado casi una semana desde que Liz asiste a la universidad, pero aun no sospecha de sus síntomas creo que ahora debe estar peor, iré a verla, si está muy avanzada, creo que comenzare la fase dos de mi plan, ese angelito, con solo irse unos días me deja todo muy despejado además de comenzar a acercarme a Elizabeth, podre enfermarla cada vez mas.
Subo a su departamento, no sé cómo puedo vivir aquí, bueno eso el tiempo lo decidirá – ríe- llegue a la puerta, apestaba a mariguana, creo que pronto habrá carne fresca en el infierno, genial mas para mis pobres súbditos, toco la puerta y siento los débiles pasos de Elizabeth…
-Hola pequeña- le digo, los rasgos de la enfermedad se están haciendo presentes
-Tom…-dijo casi en un susurro- que… ¿Qué haces aquí?
-Vengo a ver a una amiga, ¿Que no puedo?- Liz me dijo que pasara, dentro podía percibir, las sombras, o mejor dicho, el virus, mientras más cerca este de Elizabeth más rápido es su decaída- Pareces enferma –rio dentro- ¿Has dormido bien?
-Emm… si es solo que Jimmy tu sabes, y sus amigos… auch-se lleva una mano a su cabeza, y se tambalea, perdiendo el equilibro, rápidamente la tomo en mis brazos…
Narra Elizabeth
Cuando vi a Tom e la puerta, pude ver en su alrededor oscuridad, sombras, será ¿Su aura? O también la mariguana está haciendo efecto, pasó dentro del departamento, es extraño que este aquí, pero me siento segura si el esta, Jimmy ah estado enojado conmigo y me siento sola… no puedo dejar de mirar sus ojos, por mucho que no niegue en una parte de mi se siente atraída por Tom, siente que no puede estar sin él, sus carias hacen que pierda la razón y me olvide de quien en verdad soy, pienso en mi cabeza y maldigo en mis adentros.
De tanto mirar a Tom y pensar un fuerte dolor de cabeza hace que casi caiga, pero solo por medio segundo sentí sus brazos, rodeando mi cintura atrayéndome hacia él, haciéndome que me olvide de quien soy… otra vez
-Te encuentras bien… Elizabeth- susurra cerca de mis labios
-Si es solo un mareo- vuelvo a apoyar la cabeza en su pecho- ¿Me puedes llevar a mi habitación? Por favor- Pensé que me ayudaría a caminar pero, no fue así
-Sus deseos son ordenes my lady… - me sonrió es que no podía ser más tierno, me tomo en brazos como si fuera una pluma y me llevo a mi habitación, de algo estaba segura, Bill nunca seria así conmigo como lo es Tom.
A paso lento me llevó hasta mi habitación, me acostó en mi cama y se quedo unos momentos mirándome fijamente, sin apartar su vista de la mía, sus ojos avellanas tenían un brillo especial, solo pude ruborizarme, el sonrió y se levanto, cuando lo vi de pie su reflejo en el espejo de mi habitación me dejo paralizada…
-Tom… Tom…-dije asustada mientras miraba el reflejo en el espejo
-¿Qué? – el siguió mi mirada, pude notar cómo se tenso- ¿Qué hay Liz? – cuando volví a ver el espejo solo esta su reflejo y el mío acostada en mi cama
-Pero… ahí había… -lo medite me creería loca- nada solo es el dolor de cabeza- le quite importancia al asunto- Tienes… ¿hambre?
-La verdad… Mucha - me miro pícaramente con una sonrisa de lado, sus ojos se volvieron negros.
-Trate de levantarme pero mi cabeza me dolía mucho-
-No hagas esfuerzo, yo hare algo para los dos… - se acerco y me dio un beso en la frente- ¿De acuerdo?… - dijo en susurro cerda de mi rostro, nuestras frentes estaban juntas…
-Bien, solo no quemes el departamento
-Sonrió- tranquila no lo hare
Se fue a la cocina, y yo me acomode un poco en la cama en posición fetal y me tape, tenia frio, se sentían las risitas de Jimmy junto con las de su amiga desde la otra habitación, cerré mis ojos y deje que el dolor me llevara, desperté o eso creía estaba en un bosque en medio de la nada, sentía la respiración de esos monstruos de mi pesadilla comencé a correr, luego lo veo, era un demonio
Respiraba forzosamente, de su estomago saco una especie de daga, retrocedí unos pasos, tiro la daga el piso, cerca de mis pies, me levante a recogerla, el demonio se disolvió convirtiéndose en escarabajos rastreros, que buscaron un lugar donde esconderse.
Tome la daga, o eso creía que era, pero viéndola bien, era un lanza, era de oro y contenía sangre seca en la punta, cuando iba a tocarla escuche mi nombre
-Elizabeth… Elizabeth… Despierta…- Tom
Desperté, y ahí estaba, mirándome con esos ojos, pestañe dos veces para poder verlo con claridad, me sonrió y acaricio mi pelo con su mano
-Porque haces esto Tom…- le dije, mientras me pasaba una taza de café
-Digamos, que es una forma de conocernos mejor…-
-Gracias…- le di un sorbo al café, tenía mucho frio, y escalofríos recorrían mi espina dorsal, como por instinto, Tom se acostó al lado mío y me rodeo con sus brazos, necesitaba tanto un abrazo, pero una parte de mí, me decía que estaba traicionando a Bill, que estupidez el me dijo que todo había sido un error y por más que me cueste aceptarlo, tengo que hacerme la idea.
-¿Mejor?…- escuche la voz de Tom sacándome de mis pensamientos
-Si…-mi voz era un susurro, apoye mi cabeza en su pecho, el movimiento de su respiración me relajaba, era pausada, además de su aroma, me embriagaba cada vez que lo respiraba, sus manos recorrían mi cintura haciéndolo una caricia, esa sensación que tengo cuando estoy con Tom, primero de seguridad pero luego siento que estoy en peligro, la mezcla de ellos dos hace que la adrenalina fluya, levante mi mirada y ahí estaba contemplándome como si me fuera a romper, pase mis dedos por sus labios, en cierto modo me recuerda mucho a Bill, baje mi mirada avergonzada, pero luego el subió mi mentón haciéndolo que lo mirara, me perdí en sus ojos, eran infinitos, reflejaban dolor, venganza y sobre todo pasión.
-Eres hermosa, Elizabeth Armstrong…- me mintió pues estaba mas pálida que el mismo Drácula.
-No mientas Tom…- el rio de lado, luego se acerco a mí, humedeció sus labios, solo los unos milímetros nos separaban, no podía creer que esté haciendo esto, será despecho… Me beso, aquel suave contacto con sus labios era lo que nos unia. Sus labios eran suaves, como plumas, como si hubiera practicado con muchas chicas antes.
Sentí su piercing rozar mis labios, el beso se intensifico ambos mordíamos nuestros labios, pequeñas mordidas que a ambos nos hacían suspirar, abrí mi boca con la intención de recibir más de Tom, ya no le tenía miedo ni tampoco sentía peligro solo la adrenalina por mis venas, sus manos recorriendo mi cintura, sus labios bajaron por mi mentón hacia mi cuello, lograron que echara la cabeza hacia atrás donde solté leves suspiros ahogados, el me miro y me sonrió para luego continuar con el beso.
Luego solo juntamos nuestras frentes con la respiración agitada, apoye mi cabeza en su pecho, la verdad ese beso me robo mucha energía, la poca que me quedaba, combatiendo contra las emociones, las decisiones, Bill y Tom…
-Descansa mi hermosa – me dijo susurrando, yo solo cerré mis ojos sin creer lo que había hecho.
Narra Tom
Ese beso, me movió todo dentro de mí, no fue pasión, fue… ese sentimiento que creí enterrado, que me obligaron a matar, si Lucifer se entera, me matara, me levante cuidadosamente de la cama de Liz, la deja dormir, observarla con tanta tranquilidad, pronto la enfermedad estará completa, solo tiene que aparecerle la marca, la misma que tengo yo
Me acerque a ella, acaricie su cabello, verla dormir, me da tanta paz, la que nunca pude tener, me encontré como un tonto mirándola, me di media vuelta y me encontré con el espejo el que casi Elizabeth ve mi verdadera forma, no sé que habrá pasado, debió ser la enfermedad, está avanzando rápidamente.
Al salir, me fije en el dibujo que estaba pegado a la pared, esto es un avance –sonreí triunfante un paso más- me encontré con Jimmy la otra parte de mi plan, pero pareciera que ya sabe quién soy, puedo oler su miedo…
-Hola Jimmy…- sonreí – veo que ya sabes…
-Que quieres de Elizabeth…- podía ver su enojo
-Oh nada, solo proteger, ya sabes… que se encuentre bien
-Un demonio nunca hace el bien…- Sonreí
-Sé muy bien que odias a Bill, como también se que estas profundamente enamorado de Elizabeth hace ya muchos años- me acerque a él- y que por miedo no te atreves a decirle nada, piensas que eres poca cosa – comencé a merodear por el departamento – que por tu adicción la terminaras matando…
-¡Basta!... Co.. Como es que sabes tanto
-Yo lo sé todo Jimmy – mis ojos se volvieron negros – y además tienes miedo, de que te la quiten de que se vaya y te olvide, ¿A quién le importaría un adicto a las drogas?, tienes miedo de que Bill Kaulitz te la robe y lo sabes bien…
Me quede mirándolo fijamente, sus puños estaban apretados conteniendo la ira, mientras la furia y la tristeza comenzaban a fluir dentro de él, sabía que había dado en el punto exacto, para tenerlo en mi poder, eso será fácil.
-Pero…- continúe – te propongo algo querido Jimmy – Me miro- únete a mí, dame tu alma y te prometo que acabaremos los dos con Bill, así nadie te impedirá que te quedes con Elizabeth – excepto yo-
-La curiosidad mato al gato -¿Que, tengo que hacer? -dijo
-Sonreí- así me gusta Jimmy, tú obtienes lo que quieres a… Elizabeth, y a pago yo tengo tu alma, ¿Ves? Fácil solo tienes que hacer lo que yo te diga
-¿Cómo se que cumplirás?
-Yo siempre cumplo, ahora, esto dolerá solo un poco…
Me acerque a él, puse una mano en su hombro
-Listo…
-No- dijo
-Perfecto… - Atravesé mi mano en el interior de su estomago, el comenzó a gritar- no quieres despertar a Liz, Silencio si no duele- Sonreí ni yo mismo me lo creía… Cuando por fin encontré lo que buscaba, saque mi mano, con el alma de Jimmy en ella, se desvaneció en mi mano, estaría en camino para Lucifer, solté a Jimmy y el cayó al suelo arrodillándose por el dolor
-Mal… maldito- dijo en susurro
-Por hoy te lo permito, pero la próxima vez me respetas querido Jimmy, ahora tu alma es mía-me dirigí a la puerta- mañana nos vemos en la universidad, puedes contarle a tu intimo amigo Jared sobre esto, total ya ustedes están marcados… -Salí del departamento en busca de diversión, alguna prostituta con quien pasar la noche, Lujuria típico de mi…
Narra Jimmy
No puedo creer lo que hice, todo por amor… Me siento vacio, no sé como Tom pudo atravesarme el estomago, no dejo marca ni nada, me levante, hasta el apetito de me ha ido, fui al baño, me lave la cara, al mirarme mis ojos perdieron brillo, solo hay angustia y agonía dentro de mi… ¿Qué hice? Todo por ti Liz, espero algún día entienda…
Narra Elizabeth
Otro día, otro dolor, no tengo hambre eso es raro en mí, me levante y recordé todo lo que paso anoche, derrumbarme en el cama es una buena opción, que esta pasándome, ya no se qué pensar de mí, me doy asco de mi misma, no puedo hacer eso, no puedo…
Me levante y me fui a dar un baño de agua helada aun no podemos darnos el gusto de pagar el gas, primero la renta, luego todo lo demás, ya dentro de la ducha deje que el agua despejara mi cabeza, pero una gran pregunta hiso que reaccionara ¿Qué estaba haciendo? Hoy es lunes, no podre mirar a la cara a Bill si me lo encuentro. No tengo el valor
Salí de la ducha envuelta en una toalla, me mire al espejo, mis ojeras aun no desaparecen. Decidí maquillarme un poco pero no creo que resulte, tome mi cabello y Salí a cambiarme, sin ningún rastro de Jimmy esto sí que es extraño. Cuando ya tenía todo listo, libros cuadernos apuntes.
-¿Jimmy estas bien? –mientras golpeaba su puerta
-Sí, salgo en un instante- cuando salió había algo en el, alrededor de él había una sombra negra- ¿Vamos?
-Seguro…
Salimos del departamento sin pronunciar palabra alguna, algo no estaba bien entre nosotros, al llegar a la universidad, Alice, vino a saludarnos de la mano de Jared, Jimmy intercambio unas miradas con él y luego se fueron, los mire unos segundos, pero después les reste importancia.
-¿Estás bien Liz?, estas como pálida
-Si es solo que el trabajo y la presión nada mas…- la luz de Alice era blanca con dorado, llena de amor y alegría
-Eso es porque Bill no ha venido a clases, y te ha dejado todo el trabajo a ti- estaba a punto de contestarle cuando el sonido de esa moto, la que conozco tan bien apareció tras de mí- Veo que tu problema se acabo Elizabeth, llego tu compañero de trabajo – dijo mientras me daba unos golpecitos- viene para acá, bueno te dejo tienen cosas de que hablar – no sé cómo entable una amistad tan rápida con Alice, pero me agrada, me quede paralizada al escuchar su voz
-Hola Elizabeth…- lo dijo detrás de mi tan cerca que podía sentir su pecho en mi espalda- ¿Cómo estás? – no sé cómo puede hablarme si él me dijo que me alejara de él
-Me tengo que ir Bill, nos vemos en clases…- fue lo único que dije sin mirarlo, pero me lo imaginaba con su abrigo negro largo, sus ojos suavemente delineados, sus ojos avellanas, que a veces se tornaban miel.
Me fui caminando dejándolo atrás, y yo con mi mitad culpándome, entre al salón, para mi mala suerte, tocaba con la Profesora Dianne, ósea entregar las preguntas que habíamos hecho hace una semana en anatomía, me senté en el ultimo asiento, donde me sentaba con Bill en eso veo que llega Tom, me guiño un ojo, solo le sonreí, el se sentó con Alice, según lo que me cuenta Alice dice que es muy inteligente, ella le dice una pregunta y se la responde inmediatamente sin necesidad de consultar el libro de anatomía, será un gran doctor…
-Hiciste las preguntas…- Esa voz me saco de mis pensamientos mientras mi mirada estaba fijada en Tom.
-Sí, las que faltaron, fueron las ultimas, ¿Tu las desarrollaste?… - lo mire por primera vez hace cinco días, tenía la mirada triste, más que triste perdida, además de que a su alrededor, tuviera una luz violeta, junto con dorado en las extremidades, seré únicamente yo ¿Lo que lo ve?
-Sí, las hice anoche…- dijo
-A donde fuiste Bill
-Eso no te importa donde vaya, o que haga, solo somos compañeros de trabajo nada mas… -Pareciera que lo dice con dolor pero él no tiene sentimientos solo me utilizo
-Bien, de a acuerdo, entendí perfectamente Bill, préstame las preguntas para juntarlas con las demás – dije fríamente, al enojarme el dolor de cabeza volvió, saque de mi bolso unas pastillas y me las tome, Bill solo me miraba extrañado
-¿Qué te pasa? ¿Estás Bien?- dijo, por primera vez preocupándose ¿Que se cree?
-Le sonreí cínicamente- Eso a ti no te importa
Me iba a responder pero entro la profesora, y comenzó a hacer su clase, obtuvimos un punto para un próximo examen por haber terminado las preguntas a tiempo, lo único que quería era terminar la clase, la intensa mirada de Bill recorriendo mi cara, como si descifrara algo, hasta cuando es el suplicio.
El timbre me hiso reaccionar, tome mi bolso, y Salí corriendo hacia el baño, tenia nauseas, pero no tenía nada en el estomago, entre a un cubículo del baño, y comencé a tener arcadas lo primero que vi salir de mi boca fue sangre, las lagrimas inundaron mi rostro, Salí hacia el lavado y me moje mi cara, escupiendo la sangre, me estoy muriendo…
Observaba mi rostro demacrado, de pronto un ligero hilo de sangre se deslizaba por mi nariz, en eso entra Alice
-¿Liz que te paso?- Al verme se acerco a mí y me abrazo, yo llore sobre su hombro
-Es solo que me solía la cabeza, y el estomago, pero ya estoy bien…- secándome las lagrimas
-Bueno, si quieres te puedes ir a casa…
-No, no puedo perderme las clases de John tenemos examen y hoy hay repaso
-Bueno pero después le diré a Jimmy que te lleve
-No-nos interrumpieron- yo la llevare a casa
- Tú, después que te desapareces, la quieres ayudar- dijo Alice
-Alice, yo hablo con el
-Bueno- mira asesinamente a Bill- te veo en clases
-Si – salió- me pides que me aleje de ti ¿A qué juegas?
-Solo quiero ayudarte.
-Debiste pensar eso antes de jugar con migo – Salí del baño
Los pasillos se estaban haciendo eternos, para la próxima clase, tenía que llegar a la sala, no faltaba tanto, podía ver la luz de todos alrededor de ellos, negros, blancos, celestes, rosados etc. Solo quería llegar al salón
Cuando llegue, ya John estaba sentado en su escritorio con un cigarrillo en manos, solo le sonreí y pase a sentarme, la luz que estaba alrededor de él era negra, y en las orillas tenía un poco de rojo, solo subí a mi asiento esperando que esta clase pasara rápido, poco a poco comenzaron a entrar los alumnos, mi mirada se poso en Tom que se sentó unos asientos más arriba que yo, luego entro Bill, el unos asientos más abajo, ahora sí que el dolor de cabeza aumente
Narra Bill
Lo sé, soy un completo imbécil, pero es lo mejor si manteniendo la distancia entre yo y Elizabeth será lo mejor, cuando llegue, la vi, algo le pasa, tengo sospechas, pero no creo que haya podido, no creo que haya sido capaz o ¿Si?
Cuando salió corriendo hacia el baño, la seguí y mis sospechas fueron ciertas, Elizabeth fue contagiada por la peste, uno de los presagios del apocalipsis, espero poder encontrar la cura antes de que sea demasiado tarde…
Llegamos al salón de John, se perfectamente su historia, un demonio desterrado tras revelarse contra Lucifer, fije mi mirada en Elizabeth, no se veía muy bien, Tom estaba sentado un poco más arriba de ella, yo para después vigilarlo, me senté unos asientos más abajo.
John comenzó a dar su clase, los latidos de Elizabeth eran cada vez más débil, le costaba respirar… la pregunta de John hiso que toda la clase se fijara en Elizabeth
-Elizabeth ¿Te sientes bien?
-Sí, profesor, solo es un dolor de cabeza
-Si quieres puedes ir al baño
-Está bien
Cuando Elizabeth se levanto, sus piernas tambalearon y se desmayo, toda la clase se alerto, entre Tom y yo batallamos miradas ambos nos levantamos para recogerla pero fui más hábil, y logre alcanzara antes de que cayera completamente… tome su muñeca y me quemo al instante
Era demasiado tarde, la marca de la peste le había aparecido
-Llamen a una ambulancia- decía John
-¡Elizabeth!- gritaba Alice
- Yo la llevare- dije
-No Bill, yo la llevare- dijo Tom
-Después del daño que has hecho, no la volverás a tocar- le dije en susurro
-Rio – Mas del daño que le hiciste tú al irte, lo dudo, además ya es demasiado tarde
-Aun no – la tome en brazos y me fui hacia la enfermería de la universidad
Cuando entre con ella en brazos, la enfermera se alarmo.
-Recuéstala en la camilla, voy por alcohol
La recosté cuidadosamente, su cuerpo estaba tan débil, como no me di cuenta antes, porque me fui, soy un egoísta, le di el paso para que Tom actuare ahora no podre recuperarla, la marca se hacía más presente con el pasar del tiempo
Tome su mano…
-Perdóname, perdóname, no sabes cuan culpable me siento mi pequeña – bese su mano- soy el culpable de esto, espero algún día me perdones –mis ojos se humedecieron, Liz se estaba haciendo más débil, a cada minuto, a cada segundo y había sido culpa mía.
-Aquí está el alcohol- dijo la enfermera-lo vertió en un algodón, y luego lo paso por la nariz de Elizabeth, aun no reaccionaba, y yo seguía con su mano junto a la mía.
-Vamos pequeña despierta
-Estos niño de hoy en día, no usan anticonceptivos, no te preocupes muchacho serás un buen padre- no sé qué cara abre puesto, pero la enfermera se asusto y se fue a hacer la lista de los nombres, sentí un apretón en mi mano
-Elizabeth-
-Bill me duele- me mostraba su muñeca- que me está pasando
-Tranquila te llevare a casa…
-Primero explícame, se que tu puedes-suspiro- decirme… -cerro sus ojos
-Aun tienes energía, para ponerte de pie
-Si…-la ayude, a ponerse de pie
-Vamos Liz solo aguanta pronto llegaremos
-Apareció la enfermera- y para la próxima niñita usa pastillas.
-Elizabeth se sonrojo, tome su cintura para que se apoyara en mi – lo consideraremos –dije, y salimos de la enfermería.
-Elizabeth- la voz de Tom nos hiso voltearnos
-Hola Tom- le sonrió, a mi me hervía la sangre
-Te llevo a tu departamento
-No te preocupes Tom yo la llevare- le dije
-¿Tu? No me hagas reír, vamos Elizabeth…
-Thomas- solo yo y los demonios conocíamos su nombre, quiere decir que el es uno de ellos
-Adam… ¿Qué quieres?- le dije
-Nos tenemos que ir YA- remarco esa palabra
-Volvió a mirarnos, yo aun tenia abrazada a Liz- Esto no se queda así Bill
-Tu jinete te llama Tom- me fulmino con la mirada yo se la sostuve
-Se acerco a Liz- Adiós hermosa, te veo luego – la beso en los labios, mi corazón se hiso añicos en ese preciso instante, Tom me dio una sonrisa triunfante, perdí a Elizabeth, fue mi culpa, alejarme de ella, fue el mayor error de mi vida, yo era el dueño de sus labios no Tom…
-Claro…-dijo mirándolo
Nos fuimos caminando despacio, en el camino nos topamos con Alice que nos pasó su bolso con sus libros, llegamos a mi moto sin pronunciar ninguna palabra…
-Así que… Tu y Tom... son Novios…- decir eso me hacia un nudo en mi estomago, se subió a la moto.
-Solo estamos conociéndonos, un poco más que amigos…- dijo casi en un suspiro- que tengo Bill, que es esto- me indico su muñeca
-Ya te lo explicare, ya es tiempo de que lo sepas, pero esperemos a llegar, estas muy débil- asintió con la cabeza, me saque mi abrigo- Póntelo, estas enferma, necesitas calor
-Lo miro dudosa- tu también te enfermaras si no lo usas
-Vamos Liz solo póntelo, es por tu bien- me miro y se lo puso, yo me quede con mi camisa negra, ¿Que frio puede sentir un ángel? Me subí a la moto y la hice partir- sujetarte muy fuerte de mi- sus brazos rodearon mi torso, el aun que por seguridad, para mí fue el mejor momento de mi vida, su cabeza estaba apoyada en mi espalda
Salimos de la universidad, Liz tenía miedo podía sentirlo cada vez que aumentaba la velocidad, en cada semáforo ella, se soltaba un poco, luego cuando partíamos, me apretaba, menos mal que este día no llovió, solo hiso frio.
Narra Liz
Si no fuera por el abrigo de Bill, me estaría congelando. Era la primera vez que lo abrazaba sin que después me digiera un “Lo siento fue un error” estaba en paz, con migo misma, si no fuera por los dolores, cuando llegamos, aun quedaban posas de la lluvia del otro día.
-Gracias por traerme Bill- le dije mientras me bajaba
-De nada, pero no estaré tranquilo hasta que te deje arriba –se bajo de su moto y en el reflejo de la gran posa que había atrás de él, se vieron unas alas de tan majestuosas, recogidas esta vez no había mariguana, estaba consciente.
-Bill… necesito que me expliques ya
-Bien, pero subamos está haciendo frio, ¿Puedes caminar?
-Más o menos- le dije mis piernas aun temblaban
-Mejor te llevo - me tomo en brazos y entramos, subió las escaleras, cerré mis ojos dejando que el movimiento de sus pasos me llevara a un pequeño sueño, a medida que íbamos subiendo por los pasillos una luz violeta dejaba el rastro detrás de Bill.
Cuando llegamos al departamento, me bajo para abrirlo y buscar las llaves, ya dentro del departamento me fui a la cama, tenía mucho frio, espere a Bill, el tenia cosas que explicarme, muchas cosas y sobre todo la marca que me ha salido en mi muñeca.
-Lista, para escuchar la verdad…
-Lista…
Gracias por leer pero nos gustaria que comentaran u_u solo para saber si les gusta aunque sea algo muy pequeño nos sirve de mucho como inspiracion para continuar :c
Nos vemos luego~
Pd: Pasen por esta fic... http://caminodesangre-bill.blogspot.com/ es muy buena :)
Atte E. A
ooo tom tiene el alma de jimmy ahora tendra q matar a bill D:
ResponderEliminarpero lo hizo por el amor de elizabeth ..sigela esta mui buena me encanta
salu2!
me a encantado el capi, fue tan tierno, tan mágico, bill y tom fueron tan lindos, pero a la vez fue muy triste, no puedo creer que liz se valla a morir, y el pobre de mi bill no pueda hacer nada, solo espero que al final ella se salve y pueda ser feliz con el que realmente se la merezca, y me gusta que tom no es tan malo después de todo, espero que vea que de verdad no tiene que obedecer a lucifer, y que el puede unirse a su hermano, y condenar, a el encierro a ese vil demonio, me encanto, verdaderamente creo que tienes mucho talento para escribir, síguela pronto. Küsses ;) <3<3<3
ResponderEliminar